ayudas individualizadas al transporte no universitario con unos requisitos adaptados al centro educativo.

Las ayudas al transporte individualizado no universitario que ha puesto en marcha el gobierno vasco este curso 23/24
están muy bien pero las condiciones para optar a ellas no se adaptan a las circunstancias de los centros y suponen un gasto muy alto para las familias.
La ikastola de ikasbidea de Durana es uno de los casos. Con un autobús organizado por los padres el coste el curso pasado fue de 540 € por alumno. De los 73 alumnos que costearon el autobús sólo 23 recibieron la ayuda al transporte y los demás fue denegada, entre otras razones, por distancia de 4km o menos al centro o por no ser la ikastola zona de influencia de su domicilio.
El centro no dispone de un transporte público acorde a los horarios del centro ya que está en el término rural de Durana y si tendrían que ir andando por mucho que las distancia sea menor a 4 km no hay calzadas seguras para que lo recorran durante todo el curso escolar.
La zonificación la va cambiando delegación según las necesidades de la población y casi todos los chavales que están en bachiller en la ikastola Durana llevan ahí matriculados desde los 3 años ya que es una ikastola integral y en el momento de su matriculación si pertenecían a zona.
Los padres hicimos recurso contra la ayuda denegada y todavía no tenemos respuesta.
La contratación del autobus este curso 24/25 nos supone a las familias un gasto de 870€ por cada uno de los 82 alumnos de primero y segundo de bachiller.
Todo esto es de una ikastola pública que oferta una enseñanza integral que cuando los alumnos quieren hacer el bachiller parece que deja de serlo.
Las ayudas al transporte no universitario tenían que ser para favorecer la educación de nuestros jóvenes y llegar a todos.
Escuela pública hasta bachiller.