
Beatriz Artolazabal: “La globalización, la deslocalización de la producción y las cadenas de valor globales inciden sobre las estructuras laborales de nuestras Comunidades”
- La Consejera de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco ha intervenido en el I CONGRESO EDA de Mujeres empresarias y directivas del Atlántico
- “Las administraciones públicas estamos ajustando nuestras políticas y adoptando decisiones para responder a los cambios”
- “En Euskadi desarrollamos experiencias piloto con clusters como Gaia e industrias del conocimiento y tecnología aplicada”
- “Queremos detectar estos empleos que en sectores punteros de países que, como Estados Unidos, son una realidad y que en poco tiempo se convertirán en tendencia en Europa”
- “Esa cuarta revolución industrial tenemos que afrontarla desde el acuerdo social para evitar la pérdida de empleos”
Oviedo, 21 02 20
Beatriz Artolazabal, consejera de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, ha indicado esta tarde en Oviedo que “la globalización, la deslocalización de la producción y la configuración de cadenas de valor globales observan una incidencia intensa sobre las estructuras laborales de nuestras Comunidades, algo que ya se habían puesto de manifiesto antes de la crisis económica”. Artolazabal ha explicado que “las administraciones públicas estamos ajustando nuestras políticas y adoptando decisiones para responder a los cambios y, para ello, hemos de prestar avanzados servicios sociales a una población cada día más longeva y con menos recursos”.
Artolazabal ha intervenido en el I CONGRESO EDA de Mujeres empresarias y directivas del Atlántico que se celebra en Oviedo para “analizar los retos a los que se enfrenta la economía del noroeste peninsular, buscando un sustrato de colaboración común que ayude a afrontar los retos comunes a estas regiones, como son la transición energética y descarbonización, la Industria 4.0, economía circular, sector primario o demografía, generando flujos positivos de economía y riqueza”. Junto a ella han participado en el debate Enrique Fernández, Consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica del Principado de Asturias, Blanca Narváez directora general de Junior Achievement España, para la difusión de carreras Stem en colegios, Javier Fernández-Costales, catedrático de Derecho del Trabajo de la Universidad de León, María Calvo vicepresidenta de Fade, Guillermo Ulacia presidente de Femetal y la moderadora Carmen Alsina directora de comunicación de la Ceoe.
“Estamos en un permanente proceso de cambios y de relativas incertidumbres. La prudencia en el gasto e inversión son habituales e imprescindibles para familias y empresas. Nuestras industrias y pymes han sabido adaptarse y beneficiarse de los mercados globalizados. Hoy parece que la economía europea seguirá una senda de crecimiento constante y moderado”, ha señalado Artolazabal.
Según Artolazabal “en ese previsible contexto, las empresas han de redefinir y reajustar su actividad y expectativas, con más esfuerzos que antes, siendo más que nunca excelentes, líderes y referenciales. Las personas también vivimos de forma diferente: hemos de acostumbrarnos a más cambios de empleo y empresa o incluso de carrera profesional, pues desaparecen muchos empleos y se crean otros”.
Adaptación: la clave
“Las administraciones públicas estamos ya ajustando nuestras políticas y adoptando decisiones para responder a los cambios. Para ello hemos de prestar avanzados servicios sociales a una población cada día más longeva y con menos recursos y no nos olvidemos del debate sobre la extensión de la vida laboral dentro de un mayor crecimiento de la productividad” ha recordado la Consejera vasca de Empleo y Políticas Sociales.
Según Artolazabal, “las claves están en redefinir y ajustar expectativas con las de las empresas, la adaptación tecnológica, el reto demográfico, la mayor productividad y las políticas de conciliación. Estamos en pleno proceso de cambio en una evidente y positiva evolución. El mundo es “mucho más pequeño” que antes y “todo está aquí al lado”. Lo que sucede en Pekín, Seattle o Hamburgo nos afecta directamente aquí en Oviedo, en Bilbao o en Pontevedra”.
“Parece que durante los próximos años conoceremos crecimientos inferiores a los que estábamos acostumbrados. A pesar de la crisis, desde los años 80 hasta hoy los mercados, las economías y las formas de producción han crecido de forma descomunal. Todo ha cambiado y todo sigue modificándose. Pero este tiempo parece llegar a su fin y los tres factores de ese proceso son la inflación, los intereses y el crecimiento global. Las previsiones económicas de invierno de 2020 de la Comisión Europea que conocíamos la pasada semana, apuntaban a que la economía europea seguirá una senda de crecimiento constante y moderado. Esas previsiones indican que el crecimiento del producto interior bruto (PIB) de la zona del euro se mantendrá estable en el 1,2 % en 2020 y 2021. En la UE en su conjunto, es prevé que el crecimiento disminuya ligeramente hasta el 1,4 % en 2020 y 2021, frente al 1,5 % en 2019. Calculaba Mikel Atxotegi, de la firma B+I, que, a principios de los 80, cuando nuestra inflación no bajaba del 10%, el bono a 10 años cotizaba en torno al 15% y las exportaciones representaban menos del 20% del PIB en un contexto de débil crecimiento mundial. Hoy registramos una inflación 0, bono a 10 años por debajo del 2% y las exportaciones superan el 30% del PIB con un crecimiento mundial sostenido durante décadas. Gracias a esta evolución, nuestras empresas han tenido estabilidad y han podido financiar a bajo coste su crecimiento para satisfacer el incremento de demanda” ha detallado Artolazabal.
Artolazabal ha recordado a las personas asistentes al debate que “en muchas industrias y países, las ocupaciones o especialidades más demandadas hoy no existían hace diez o cinco años y la velocidad del cambio seguirá acelerándose. Según algunas estimaciones, el 65% de los niños y niñas que hoy entran en la escuela primaria terminarán trabajando en trabajos nuevos que ahora no existen”
Euskadi, experiencias piloto
“Estamos trabajando experiencias piloto con clusters vascos, como Gaia e industrias del conocimiento y tecnología aplicada. Queremos detectar estos empleos que en sectores punteros de países como Estados Unidos ya son una realidad y que en poco tiempo se convertirán en tendencia en Europa. Nuestro Servicio de Empleo trata de orientar la formación hacia estos campos nuevos, como la robótica. Apoyamos iniciativas para formar programadores a jóvenes en riesgo de exclusión. La formación profesional y universitaria dual en el aula y en la empresa tiene más posibilidades de adaptarse a las tendencias que vienen. Esa cuarta revolución industrial tenemos que afrontarla desde el acuerdo social para evitar la pérdida de empleos” ha añadido.
“Nuestra sociedad, las nuevas generaciones, las empresas y las personas que ya están en el mercado laboral, han de redefinir su sistema educativo y de aprendizaje permanente. Los retos son varios: Una formación tecnológica especializada, la adquisición y desarrollo de Competencias transversales, un mayor conocimiento de idiomas y la formación permanente a lo largo de la vida” ha recalcado.
Para Artolazabal “en Euskadi, como aquí en Asturias y en toda la fachada atlántica industrial europea, el tejido industrial y social se enfrenta al reto de la cuarta revolución industrial que, dentro de la implementación de la industria 4.0, trae consigo la digitalización y automatización de los procesos de producción. Este es uno de los principales retos a los que se enfrenta el empleo”.
“Creo que en el futuro va a tener más valor el trabajo cooperativo y la generación de redes. Por eso, en el Gobierno Vasco, desarrollamos un Pacto Social Vasco para una Transición Justa a la Industria 4.0, un nuevo Observatorio de la Orientación que surge de nuestra Mesa de Dialogo Social, planes de recolocación de personas en situación de desempleo por el impacto de la 4ª revolución industrial, cobertura social a personas trabajadoras sin posibilidad circunstancial de recolocación durante el proceso de recualificación y vuelta al mercado laboral, impulso a que colectivos en situación de desempleo de larga duración se reincorporen al mercado laboral como consecuencia de las nuevas oportunidades que surgirán en el marco de la Industria 4.0; formación especializada y la igualdad de oportunidades para la mujer en todo momento” ha explicado Beatriz Artolazabal.