
La exposición sobre el atentado de ETA en la Cafetería Rolando de Madrid, en 1974, llega a Bilbao de la mano de Gogora y el Memorial de Víctimas
- Gogora y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo colaboran para traer a Bilbao la muestra ‘Rolando 2:15 2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’
El edificio ‘La Bolsa’ de Bilbao acoge desde hoy y hasta 31 de marzo la exposición ‘Rolando 2:15 2:45. 50 años de la primera masacre de ETA’, atentado en el que murieron 13 personas y 70 resultaron heridas.
La muestra recala por primera vez en Bilbao de la mano del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos-Gogora y el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo. Esta iniciativa conjunta se enmarca en el impulso que Gogora pretende dar al ámbito de la divulgación, herramienta principal para lograr situar el organismo en el centro de la sociedad en lo que a la construcción de la memoria se refiere, colaborando para ello con las instituciones que, como el Memorial, trabajan en este ámbito.
Esta mañana, Alberto Alonso, director del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos Gogora ha presentado el acto de inauguración de la exposición. Seguidamente, la consejera de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco, María Jesús San José y el director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, han tomado la palabra junto con Alicia Gómez Cuadrado, hija de Francisco Gómez Vaquero, cocinero de la cafetería y víctima mortal del atentado.
La consejera María Jesús San José se ha referido a su compromiso y al del Gobierno Vasco al apoyar esta muestra “mi compromiso, y el del Gobierno Vasco, es impulsar una memoria en la que la diversidad, el derecho a la diferencia, la pluralidad, todos ellos valores básicos en la construcción de sociedades democráticas, les ganen el terreno a los mensajes de odio, a la exclusión del diferente, a la uniformidad cultural”.
En este sentido ha añadido “hago un llamamiento para que, entre todos, podamos construir una memoria que sea capaz de neutralizar las pasiones, de arrinconar los viejos relatos de héroes y traidores que tanto daño han hecho a esta sociedad”.
Florencio Domínguez, director del Memorial por su parte ha resaltado el sentimiento de olvido que ha acompañado a los damnificados por este atentado indiscriminado: “Han sido muy olvidadas. Ellas mismas han tenido esa sensación de estar más olvidadas que otras. Cuando para preparar esta exposición grabamos testimonios de víctimas de aquel atentado, y después han venido a las exposiciones que hemos ido llevando a diversas ciudades, es una satisfacción percibir la alegría que, de alguna manera, les produce este reconocimiento, aunque sea con 50 años de retraso”, apuntó.
Tras las intervenciones institucionales ha tomado la palabra Alicia Gómez Cuadrado, hija de Francisco Gómez Vaquero, cocinero de la cafetería y víctima mortal del atentado que se ha referido, precisamente, al abandono y al olvido que han sufrido las víctimas y lo que supone esta muestra: “esta exposición lo que nos brinda es un refugio para su memoria y un acto de resistencia contra el olvido”. Alicia Gómez ha subrayado la importancia del trabajo de investigación que refleja la exposición y la aportación a la verdad que realiza “arroja luz sobre los hechos ocurridos y eso es un regalo, para mí, para todas las víctimas y para todos vosotros”
“Las víctimas del terrorismo tenemos el derecho fundamental a ser reconocidas y recordadas, y este reconocimiento no solo implica recordar sus nombres y sus historias, si no también entender el contexto de su sufrimiento y la repercusión que ha tenido en sus vidas y en la de sus familias. Merecemos ser escuchados. Porque la memoria no es solo un acto de justicia, sino un compromiso moral con la verdad. No permitamos que se utilice el silencio como una forma de acomodarse al presente, y que nuestro dolor nunca sea minimizado ni tergiversado” ha declarado Alicia Gómez.
Al acto de inauguración han asistido varias víctimas del terrorismo: Dori Monasterio, hija de Fermín Monasterio, asesinado por ETA en 1969 y Asun Olaeta víctima de la violencia de persecución por parte de ETA y miembro de la Asociación Zaitu.
Junto a ellas, una persona que sufrió el atentado de la Cafetería Rolando en primera persona, Pedro Chicote Alonso. Aquel 13 de septiembre de 1974 llevaba menos de dos semanas trabajando como policía, y cuando bajaba por la calle, la onda expansiva de la bomba le alcanzó derribándole al suelo. Pudo reponerse y se dedicó a rescatar a los heridos de la cafetería, hasta 15 personas, pero llegó un momento en el que se desmayó y lo trasladaron al hospital.
Su historia aparece reflejada en el panel número 18 de la exposición. Es uno de tantos testimonios que componen la historia de este cruel atentado. Las asistentes a la inauguración han podido conocer el contenido de la muestra de la mano de Gaizka Fernández Soldevilla, responsable del Área de Archivo, Investigación y Documentación del Centro Memorial y uno de los comisarios de la exposición.
El acto de esta mañana ha contado con una amplia representación institucional. Por parte del Gobierno Vasco: Alfredo Retortillo, viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Convivencia, y Jagoba Álvarez, director de Derechos Humanos y Atención a Víctimas. Ana Otadui, y Begoña Gil, presidenta y vicepresidenta primera de las Juntas Generales de Bizkaia respectivamente.
Por parte del Ayuntamiento de Bilbao han asistido la teniente de alcalde Nora Abete y Amaia Arregi, Iñigo Zubizarreta y Ana Viñals, ediles del consistorio y la directora del área de Derechos Humanos del consistorio Monika Hernando.
También han estado presentes, entre otros, Ion Gambra, director de Derechos Humanos y Memoria de la Diputación de Gipuzkoa y miembro del Consejo de dirección de Gogora; Pau Blasi parlamentario del grupo socialista; Iñés Ibañez de Maeztu, adjunta al Ararteko; el subdelegado de Defensa Bilbao y el coronel jefe de la Comandancia de Bizkaia.
El Gobierno de España ha estado representado por su delegada, Marisol Garmendia, y el subdelegado Carlos García.
Contenido de la exposición
La exposición está estructurada en 22 paneles (con códigos QR que aportan más información) y en ellos se intercalan los diferentes hitos del atentado con la historia personal de las 13 víctimas mortales. Uno de los paneles está dedicado a las personas que arriesgaron su vida para ayudar a los afectados, como Pedro Chicote Alonso, y ahí se encuentran vecinos, empleados de los establecimientos afectados, bomberos, policías, sanitarios y taxistas. Su rápida y valiente actuación salvó multitud de vidas. Está comisariada por Gaizka Fernández Soldevilla, responsable del Área de Archivo, Investigación y Documentación del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, Ana Escauriaza Escudero, investigadora de la Universidad de Navarra.